La xilografía hizo posible por 1era vez que se reprodujese técnicamente el dibujo, antes que la imprenta lo hiciese con la escritura: Reproductibilidad técnica de la escritura.
La litografía, fotografía, el cine hicieron que hacia finales del 1900 la reproducción técnica había alcanzado un standard ya que convertía en tema propio la totalidad de las obras de arte heredadas y conquistaba además un puesto específico entre los procedimientos artísticos.
En la reproducción técnica mejor acabada falta algo: el aquí y ahora de la obra de arte, su existencia irrepetible en el lugar en el que se encuentra.
El aquí y ahora del original constituye el concepto de su autenticidad. Lo auténtico conserva su autoridad plena, mientras que no ocurre lo mismo con la reproductibilidad Técnica.
La reproductibilidad técnica de la obra de arte atrofia el aura de esta. La técnica reproductiva desvincula lo reproducido del ámbito de la tradición. Al multiplicar las reproducciones pone su presencia masiva en el lugar de una presencia irrepetible.
Cine: movimiento de masas más importante: la liquidación del valor de la tradición en la herencia cultural.
El valor único de la auténtica obra artística se funda en el ritual en el que tuvo su primer y original valor útil.
Cine: el hombre que actúa debe renunciar a su aura que está ligada a su aquí y ahora. En el rodaje cinematográfico los aparatos ocupan el lugar del público por lo que además de desaparecer el aura del actor, desaparece el aura del personaje.
Es un espectáculo que no reclama esfuerzo, no supone continuidad en las ideas, no plantea ninguna pregunta y que no aborda con seriedad ningún problema. Las masas buscan disipación y el arte reclama recogimiento. Quien se recoge ante una obra de arte se sumerge en ella.
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